Sukošan, Zadar

Los vestigios de piedra que adornaron las verdes áreas de la riviera de Zadar se extienden hasta la hermosa bahía donde se asienta cómodamente Sukošan.

Antiguamente una ciudad amurallada, Sukošan ahora solo atestigua su agitada historia a través de restos como la Puerta Superior del siglo XV. Junto a ellas, aún vigila la iglesia de Nuestra Señora de la Misericordia, cuyos inusuales adornos transmitirán a los visitantes su función defensiva en tiempos pasados.

Sukošan cautiva con la iglesia de San Casiano, que, además de su hermoso campanario, esconde muchas leyendas sobre su santo patrón. También intriga a los visitantes el palacio de verano del obispo Palac, del siglo XV, cuyos restos yacen en un tranquilo islote en medio de la idílica bahía.

El pintoresco pueblo mediterráneo de Sukošan también revela su encanto en uno de los mayores puertos deportivos de Croacia. La azulada bahía cada verano se adorna con multitud de velas blancas que encuentran su paz en la marina de aspecto impresionante.

Además de ser un paraíso para los navegantes, Sukošan es conocido por sus hermosas playas, que, debido a la bahía de arena poco profunda, son un verdadero paraíso para los niños. Los primeros turistas, encantados con este lugar, incluso nombraron a una de sus playas El Paraíso de los Niños, un apodo que los lugareños acogieron con gusto.

La diversión continúa aquí durante las noches de verano, que están llenas de la alegría de numerosas festividades, competiciones tradicionales como la carrera de burros, y los sonidos de la música de klapa que resuena por las estrechas calles.