Como la ciudad más antigua fundada por los croatas, Šibenik se alza en la costa del mar Adriático, cerca de la desembocadura del río Krka. La belleza de su paisaje se complementa con monumentos culturales e históricos, encabezados por la mundialmente famosa catedral de San Jacobo, un sitio protegido por la UNESCO. Šibenik también impresiona con la fortaleza defensiva de San Miguel, así como con la fortaleza triangular de San Nicolás, situada en la entrada del puerto, que desde 2017 también forma parte de la lista del patrimonio cultural mundial de la UNESCO.
Al recorrer la ciudad, no te pierdas la Plaza de las Cuatro Fuentes; de ellas se extraía agua en tiempos pasados, y hoy en día la plaza sirve como escenario para conciertos y festivales, saciando la sed de los oídos con diversas melodías y ritmos.
Šibenik es más conocido por la catedral de San Jacobo, que lo ha llevado a la lista del patrimonio cultural mundial de la UNESCO. Impresiona el hecho de que la catedral, construida entre los siglos XV y XVI, está hecha completamente de piedra, y también llamará tu atención la enigmática galería de retratos de piedra en la pared exterior.
Quizás reconozcas las desconocidas caras de las esculturas como caballeros, malabaristas, organistas y artesanos de oficios antiguos que inundan las calles en septiembre, cuando Šibenik acoge una feria medieval. Durante este evento, la Guardia Municipal dispara cañones, se lleva a cabo una batalla naval y competiciones de caballeros.
Una rara joya, el jardín monástico medieval, embellece el paseo por las estrechas calles de Šibenik con el embriagador aroma de rosas, hierbas medicinales y especias en combinaciones artísticas de colores.
En las cercanías de dos parques nacionales, Krka y Kornati, Šibenik logra mantener su posición en la lista de los destinos náuticos más bellos. La lujosa Marina Mandalina es especialmente atractiva durante la feria náutica Adriatic Boat Show.
Ocho órganos antiguos han marcado a Šibenik en el mapa de eventos musicales desde el siglo XVI. Mientras que la creatividad infantil se destaca durante el Festival Internacional de Niños, las Noches de Chanson Dálmata traen melodías tradicionales dalmatinas. La conciencia ecológica de Šibenik se demuestra en el festival musical Terraneo, donde la ecología se integra en agosto no solo a través del programa musical, sino también mediante talleres, conferencias y exposiciones, y finalmente, a través de las mismas calles de la ciudad.